miércoles, 30 de abril de 2008

MEHUIN: ENVENENADOS POR CELCO



La celulosa tentó a la pobreza de Mewin ofreciendo millones a cambio de ducto, rompiendo la unidad de todo un pueblo contra la empresa del grupo Angelini y generando el odio entre los propios pescadores y lafkenches de Mewin.





Hasta hace unos pocos años atrás, esta hermosa caleta vivía en las rencillas simples de una familia cualquiera: roces pequeños, uno que otro enojo, alguna mala cara, pero nada más que eso entre la felicidad de un pueblo que desarrollaba su vida en torno a un mar propio, donde cada uno era dueño tanto como el compañero.

Pero CELCO clavó sus colmillos como la peor fiera, destruyendo un pueblo que hoy se mira con odio, se ataca y se trata como enemigo. Un pueblo dividido entre quienes se vendieron y quienes no al demonio forestal.

X Isabel Valentina

http://www.surgencia.com

“Antes nos juntábamos todas aquí, a la orilla, esperando a nuestros viejos, echábamos la talla, conversábamos hasta que nuestros pescadores llegaban de alta mar, hoy nos tenemos miedo entre nosotros… cuánto me gustaría que las cosas volvieran a ser así, antes de que CELCO llegara a nuestro pueblo”.

Escuchar a Mónica provoca una sensación de rabia furtiva, furtiva en un comienzo, cuando poco a poco se dimensiona lo que una empresa forestal apoyada por el propio Estado, ha hecho entre un pueblo que no sólo se logró organizar en unidad contra la maquinaria de la Celulosa Arauco-Constitución, sino también un pueblo que hasta la llegada del grupo Angelini a sus tierras, vivían en comunidad desde su existencia, compartiendo familias, amigos, luchas, llantos y largas esperas por cada tarde cuando un pescador volvía de alta mar.

Cruzando desde la caleta de Mewin, al otro lado del río, antes de llegar a Missisipi, una especie de “monolito”, de esos levantados para recordar a los muertos, llama la atención. Es ahí donde precisamente se recuerdan a los pescadores que apagaron su vida entre las olas del pacífico, entre redes y cielo amplio, mientras recogían el sustento que los devolvería a tierra firme.


Los muertos no están divididos entre vendidos y no vendidos, se quedaron bajo tierra siempre unidos con todo un pueblo llorando la partida de sus hijos. Hoy, esas palabras de Mónica reflejan lo que CELCO dejó bajo tierra, enterrando junto a los muertos la unidad en un solo puño de los pescadores y lafkenches de la Bahía de Mewin con el más sucio de los trucos, la tentación a la pobreza con sus cheques mal venidos firmados por la arrogancia de los ricos de este país.

Mónica es una de las mujeres que hoy sigue en pie firme contra la instalación de un ducto en Mewin, construcción que amenaza con destruir los recursos con los que las familias de esta zona costera valdiviana han sobrevivido siempre.

La planta de CELCO, está ubicada a unos 5 kilómetros de San José de la Mariquina en la nueva Región de Los Ríos. Desde hace casi doce años, este demonio forestal amenaza de muerte a los pescadores. Ante eso, el pueblo costero comenzó a organizarse partiendo por la confluencia en el Comité de Defensa del Mar que tendría como principal objetivo impedir la instalación del ducto que pretende trasladar los desechos de la planta de celulosa hasta sus costas.

Estratégicamente, en estos últimos años, el trabajo del comité se centró en impedir la realización de los Estudios de Impacto Ambiental EIA, trámite legal necesario para comenzar a ejecutar el proyecto de la instalación del ducto y que cuenta de tres etapas para su realización. Hasta hace un año, CELCO no había logrado realizar ninguno de los EIA debido precisamente a la fuerza opositora contra la que estaba chocando en Mewin. Algo de eso se vio por los informativos nacionales cuando la armada chilena efectuó disparos contra los pescadores que cuidaban en alta mar.

Claro estaba que la pelea que darían era contra un gigante que siempre ha contado con el respaldo oportuno de la concertación tanto para colaborar en la aplicación de los estudios de impacto exigidos por ley –lo que implica prácticamente la instalación del ducto- como para asegurar que se realicen las exploraciones en subsuelo por el supuesto “descubrimiento minero” que la empresa, coincidentemente, hizo en el sector que une su planta con la bahía de Mewin, artimaña burda usada por el demonio forestal para comenzar a trabajar en las 5.790 hectáreas que CELCO pretende expropiar con la aprobación del estado chileno y trayendo consigo el odio y la división entre quienes luchaban con un solo puño.
CONTRATANDO CONCIENCIAS

Este famoso ducto, no es más que un tubo que pretende trasladar los desechos industriales de la papelera a una zona “protegida” por ley y donde vive una comunidad de pescadores y lafkenches que hasta 12 años vivían en la calma de la “democracia”.

De este tipo de ideas brillantes de CELCO ya conocen otros sectores del país, incluso en la misma zona del sur, como el desastre en el Río Cruces en 1998 que sucumbió a los cercos informativos al comenzar a difundirse las imágenes de los cisnes de cuello negro muertos o trastornados en su tradicional hábitat natural todo gracias a la contaminación del cauce provocada por la celulosa. O también lo sucedido en el Río Mataquito gracias a la planta Lincancel, construida en 1976, que provocó un desastre ecológico atentando contra la fauna y la gente delatando la cesantía obligada de pescadores y agricultores gracias, nuevamente, a la contaminación de CELCO.

Y claro, CELCO, propiedad de uno de los grupos económicos más poderosos del país y encabezado por el recientemente muerto Anacleto Angelini, ante la fortaleza que se había generado en la costa sureña buscó las formas necesarias para lograr su objetivo a toda costa sin importar los medios.

Para eso estos empresarios “que visten Armani” no encontraron mejor manera de lidiar con el pueblo mewinense que tentando a la pobreza y la conciencia débil, presionando a los pescadores a vender por medio de un contrato no sólo su postura ante la instalación del ducto, sino también a muy bajo precio su dignidad.
Así, CELCO, comenzó a tejer las redes necesarias para acercarse a pescadores vulnerables que accedieran a negociar sus posturas frente a la ejecución de los EIA a cambio de unos cuantos millones de pesos. A mediados del año pasado, la empresa encargó al presidente del Club de Deportes Valdivia, Jorge Salazar, realizar este “trabajito” y comenzar a buscar a pescadores que estuvieran dispuestos a venderse. Muy aplicados, ya en octubre del 2007 los sicarios de Celco lograron que uno de los principales opositores al ducto y presidente del sindicato Número 3 de Pescadores Independientes de Mewin, Joaquín Vargas, en una actitud indigna y traidora, tranzara con los forestales y se dispusiera a colaborar férreamente a cambio de los suculentos cheques provenientes de la empresa Angelini.

Por medio de un contrato denominado por ambas partes “Convenio de Colaboración Recíproca” se aseguraban los pagos por parte de la empresa a quienes firmaran con CELCO para que la empresa lograra realizar los EIA en la costa sureña. La idea, tal como dice el documento, es "trabajar en pleno espíritu de colaboración en los estudios y mediciones, en particular aquellas a realizar en invierno y verano, que resulten necesarios para explorar la factibilidad de construir y operar un emisario submarino de propiedad de la Sociedad, en el área de la bahía de Mewin".

Hoy, CELCO ya desembolsado 4.500.000 pesos por pescador vendido, lo que significa en total para la empresa un desembolso de unos 10 millones de dólares invertidos muy bien acorde a sus objetivos, pues ya se realizó el primer de los estudios con la colaboración de buena parte del pueblo de Mewin, logrando, por medio de la instalación de la violencia entre la misma gente que se ha expresado en ataques contra los pescadores que no se han vendido y con la infaltable colaboración del gobierno, quien desde hace ya tres semanas mantiene a fuerzas especiales de carabineros instaladas en la escuela básica de la Caleta de Missisipi, con micro y guanaco incluidos.

Es cierto que de su miseria no se puede culpar al pobre, que lo hecho por CELCO fue precisamente hincar el diente donde podrían sacar la mejor mascada, pero es cierto también que los millones que han recibido quienes han negociado con la empresa son hambre para el futuro.
La tensión se respira en Mewin, después del ataque perpetrado por pescadores contratados por CELCO a la sede del Comité de Defensa del Mar hace cerca de un mes, el pueblo se mantiene en polarizado, con temor a quienes conocen desde hace años, con quienes han compartido prácticamente una vida.

Es cierto que de su miseria no se puede culpar al pobre, que lo hecho por CELCO fue precisamente hincar el diente donde podrían sacar la mejor mascada, pero es cierto también que los millones que han recibido quienes han negociado con la empresa son hambre para el futuro. Hoy, el pueblo está polarizado, nadie quiere salir sólo, y el dolor se ha instalado entre quienes ahora ven cómo, aquellos en quienes habían depositado toda su confianza, aquellos a quienes admiraban por su compromiso y convicción, hoy son capaces de atacar incluso con armas por CELCO.
Un río divide a la caleta de Mewin de la caleta de Missisipi, en ese río, ahora se dibujan los odios que CELCO logró imponer en el pueblo, tentando a los pescadores y lakenches que se vendieron y que hoy, bajan el rostro cuando se les pregunta por el contrato que firmaron. Varios de ellos aseguran que el contrato implica sólo los estudios, que ellos no se han vendido al ducto y que incluso, son capaces de entregar su vida para que CELCO no logre instalarlo desde su planta en San José de la Mariquina hasta la costa de la que viven, incluso, llegan a hablar de arrepentimiento.

Claro está que este demonio forestal dio un golpe inescrupuloso y sucio como su proyecto, inyectando la desconfianza para algunos imposible de reconstruir entre los habitantes de Mewin y Missisipi, pero este golpe no es uno que atente contra una parte pequeña de nuestros pueblos, este es un atentado contra todos nosotros.


martes, 15 de abril de 2008

VECINA INFORMESE OCURRE QUE DE AHORA NO PUEDE USAR LA "T" !!






INDIGNATE, DIFUNDE, SÚMATE





¡A defender el derecho a decidir sobre nuestra sexualidad!

Como ya es sabido, un grupo de 36 diputados de derecha,
respaldados por la Iglesia Católica, presentaron ante
el TC un recurso para declarar inconstitucionales las
Normas de Regulación de la Fertilidad que el gobierno
dictó el 2007, con el propósito de proscribir no sólo
la Píldora de Anticoncepción de Emergencia (PAE), sino
también la confidencialidad en la consejería sobre
anticonceptivos a menores de edad, los Dispositivos
Intrauterinos (DIU) como la T de cobre y la mayoría
de las píldoras anticonceptivas de uso regular. Esto
es, casi la totalidad de los métodos de anticoncepción
con que cuentan en la actualidad las mujeres de nuestro país.

Dado el revuelo social que causó esta noticia, el TC se
vio obligado a emitir hace unos días un comunicado. En
él anunció que había admitido la inconstitucionalidad de
la PAE y de todos los anticonceptivos que contienen
levonorgestrel, que constituyen la gran mayoría de las
pastillas que son entregadas actualmente en los consultorios.
Manifestaron además que el fallo se limitaba a prohibir su
entrega en el servicio público de salud, quedando por el
momento estos fármacos a disposición en las farmacias para
quienes puedan pagarlos. Este hecho es de suma gravedad,
pues implica un alto costo para las mujeres con menos recursos,
las cuales no contarían con los medios para prevenir
embarazos no deseados. A los políticos que presentaron
este recurso, a la Iglesia Católica y a los miembros del
TC parece no importarles el drama de la gran cantidad de
adolescentes que quedan embarazadas anualmente, sobre todo
en los sectores populares, las que tienen que asumir muy
tempranamente la maternidad y en un contexto de precariedad
económica. Tampoco les importa la gran cantidad de abortos
que se realizan las mujeres en la clandestinidad y en
condiciones de insalubridad, corriendo el riesgo de contraer
graves infecciones, de perder la vida o de ir presas,
puesto que el aborto en Chile está penalizado.

Por lo demás, si todas las evidencias científicas demuestran que la
PAE no es abortiva, ¿en base a qué criterios los miembros del TC
tomaron la decisión? Este fallo no tiene un carácter técnico, como
corresponde a las atribuciones jurídicas de esta entidad, sino que es
una decisión política que responde a criterios ideológicos y morales.
Es un acto arbitrario y además autoritario, en la medida que pretende
imponer la visión de una minoría en materia de sexualidad y
reproducción a toda la población, vulnerando nuestro derecho a decidir
sobre nuestra sexualidad, sobre la cantidad de hijos que queremos
tener y su espaciamiento. Se trata de la decisión de personas –casi
todos hombres de extrema derecha- que ni siquiera fueron elegidas
democráticamente, sino designadas para velar por la Constitución
heredada de la dictadura. Es por ello que rechazamos el fallo del TC y
nos levantamos para impugnarlo.

Es en este contexto que el Movimiento por la Defensa de la
Anticoncepción hace un llamado a todas y todos a movilizarse frente a
este tema y a sumarse a las acciones de repudio que estamos realizando
desde la sociedad civil. Como ciudadan@s no podemos aceptar que se
vulneren nuestros derechos sexuales y reproductivos y debemos exigir
que el Estado garantice los medios que nos permitan tener relaciones
sexuales seguras y placenteras, sin correr el riego de un embarazo no
deseado. Debemos exigir una sociedad democrática donde se respete el
derecho a decidir de las personas acerca de su sexualidad.

¡¡Exijamos sexo seguro sin riesgo de embarazos no deseados, equidad en
el acceso a métodos anticonceptivos y una verdadera democracia!!


CALENDARIO DE MOVILIZACIONES


-Miércoles 9 de abril, 12:30 hrs: manifestación frente al Tribunal
Constitucional (Mc Iver con Santo Domingo)


-Miércoles 16 de abril, 18:30 hrs: marcha desde Ahumada con Alameda
hasta Plaza de Armas. Allí se realizará un acto ciudadano.


-Martes 22 de abril, 19:00 hrs: Jornada de Movilización Nacional. Gran
marcha desde Plaza Italia.


-Martes 29 de Abril, 12:30 hrs: acción en repudio a la intervención de
la Iglesia Católica en materia de sexualidad y reproducción. Escribir
a: pidamoslaexcomunion@gmail.com



Movimiento por la Defensa de la Anticoncepción